Pocho y su hija mayorLucy.

Mi Amigo

Pocho Rospigliosi
28. April  3 Min. Lesezeit 
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Por…Jaime Villanueva.-Hoy me senté frente a mi màquina con la seguridad que siempre venia usted. Hoy el golpe màs fuerte de la vida a derrotado mi sensibilidad. Hoy lleguè a la redacciòn y la tristeza rondò junto a su escritorio.Como si estuviera ahi,meditando y pensando,queriendo disimular un dolor o una profunda preocupaciòn.
Que ironia la del destino,Maestro Pocho.Al acercarme a nuestro local,un velorio apenas unas cuadras antes anunciaba una noticia desagradable. Me pellizqué.ingrese al diario y un silencio profundo me confirmò la mala noticia. Que nos espera a nosotros los nuevos periodistas si ya no contaremos con su amplia experiencia y su sabios consejos?? Allà en el cielo lo aguardan sus ejemplares padres,su entrañable amigo Coco Cardenas,Cuatacho,Borocotò y muchos otros màs;sin embargo aquì en la tierra testigo de su batallar en la vida,nos dejò un eterno recuerdo,un memorable ejemplo de superaciòn. Recuerda aquellos tiempos ?Yo era mas chiquillo y usted todo un señor yo muchacho de la calle y usted una figura nacional. Ahora quien sabe por donde estarà. Lo que gozabamos todos los que andàbamos con usted desde que salia el sol hasta que se escondìa la luna! Le llamàbamos Profe..por que realmente lo fue,siempre pedagògico en su accionar.No sè quièn le puso este seudònimo.Creo que llegò solo.En ello se luciò.
Uno,dos,tres,años fueron suficientes para codearse con la fama;a esa fama que primero conociò por sus crònicas y despuès por la exquisita sastreria a la que apelaba risueñamente. Zapatos elegantes,trajes de medida y corbatas chillonas,caian con gusto sobre su voluminoso cuerpo. Se veìa en usted al muchacho que quiso deslumbrar al barrio. A travès de esa indumentaria costaba trabajo reconocer al Pocho a quien no podìa enseñàrsele nada por que realmente todo lo sabìa. Hasta hablar en difìcil,con todos los giros verbales del barrio. El destino se ha llevado al forjador de muchos periodistas,futbolistas,voleibolistas y boxeadores. En cada crònica suya quedarà ese enseñanza que nunca podremos olvidar:Al escribir una nota,èsta debe tener su parte medular;una jocosa y otra humana,porque la risa pasa y el sentimiento queda. No es grato morir,señor,si en la vida nada se deja,porque en la misma , para hombres como usted,nada es imposible.Usted se ha ido con el deber cumplico.Usted me dijo que yo era su ùltimo discìpulo,a usted le debo mucho de lo que soy, y le juro que no lo defraudarè. Humildemente Jaime Villanueva..para usted El Marquez… Fuentes.Diario el Nacional.Octubre 1988

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